Estuvieron debajo 2-0 en una serie al mejor de 5 ante los Rojos de Cincinnati, pero ganaron los tres juegos seguidos en el Great American Ball Park de la ciudad de Cincinnati para así avanzar hacia la Serie de Campeonato de la liga Nacional, en donde se enfrentarían a unos sorprendentes Cardenales de San Luis.
La serie de campeonato ante los Cards se puso fea para los Gigantes, cuando cayeron debajo 3-1 en la serie al mejor de 7, lo que indica que debían ganar los tres juegos para poder ir a la serie mundial, algo que parecía difícil pero no imposible para los californianos, y así fue, nunca se dieron por vencidos, siempre se mostraron optimistas, y lo lograron, GANARON los siguientes tres partidos para eliminar de forma dramática a los Cardenales y pasar directos a la Serie Mundial.
Llegaron a la Serie Mundial, la cual comenzaría en su hogar "El AT&T Park" gracias a la victoria del equipo de la liga nacional en el Juego de Estrellas, en el cual dos de sus hombres fueron los héroes (Pablo Sandoval y Melky Cabrera). Allí se enfrentarían a unos Tigres de Detroit que venían de "ACABAR" con el equipo que terminó con el mejor record en la serie regular, y el equipo que más jonrrones dió de toda la MLB, venían de barrer 4-0 a los Yankees de New York.
Todo comenzaría con un "largo descanso" de 6 días que tenían los Tigres.
El primer juego fue memorable, Barry Zito limitó a una hambrienta ofensiva de los Tigres de Detroit a solo una carrera, el partido terminó 8 por 3, con una gran hazaña del Venezolano Pablo Sandoval, quien conectó 3 enormes cuadrangulares en el juego, dos de ellos frente al As de los Tigres, el pitcher más consistente de la Liga Americana (Justin Verlander), quien no pudo aguantar a la ofensiva de los Gigantes, y no llegó al 5to inning.
En el segundo juego, esperaba a los Tigres en el montículo, Madison Bumgarner, los Tigres llegaron a acabar con este lanzador, pero no pudo ser posible, Bumgarner lanzó 7 entradas completas permitiendo los únicos dos hits de los Tigres en el partido, el cual concluyó 2 por 0.
Para el tercer juego la serie se muda al "Comerica Park" Hogar de los Tigres de Detroit, Allí el venezolano Anibal Sanchez esperaba a los Gigantes, con el plan de frenarlos para acercar la serie, los Gigantes de su parte llevaron a Vogelsong a la lomita, Sanchez lanzó siete excelentes entradas de solo dos carreras, pero los anémicos bates de los Tigres no pusieron de su parte, el pitcheo de los Californianos nuevamente le tiró 9 ceros, limitándolos a 5 imparables solamente. 2-0 fue el final del tercer juego.
Ya con la serie 3-0 a favor de los Gigantes, Matt Cain se enfrentaría a Scherzer en un juego donde "no hay mañana" para los de Detroit, comienza el juego 1 por 0, arriba los Gigantes, y ya las caras de preocupación eran muy notables en el Comerica, pero llegó un batazo alentador de Miguel Cabrera con un hombre abordo, un cuadrangular por el jardín derecho que viró la pizarra, 2 por 1 arriba los Tigres, pero los Gigantes querían terminar con el asunto, Buster Posey conectó un cuadrangular de 359 pies en el sexto capítulo con Scutaro abordo, y los Gigantes vuelven a adueñarse de la pizarra, 3 por 2 el juego.
Delmon Young devolvió el animo a los jugadores, fanáticos, y todos los relacionados con los Tigres, cuando en la misma sexta entrada conectó un monstruoso cuadrangular por todo el jardín derecho para empatar el juego a 3 carreras, las sonrisas eran notables en el Comerica, el juego se fue a entradas extras y Marco Scutaro conectó un sencillo remoldor en la décima entrada para poner el juego 4 por 3 y solo tener que sacar tres outs para coronarse, el uso de cortauñas se reduciría en Detroit.
Austin Jackson entrega la primera pala de tierra, y los nervios se adueñaban aún más de las personas, no solo de los seguidores de Detroit.
Berry falla para el segundo out, y todas las esperanzas estaban nada más y nada menos que en el triplecoronado Miguel Cabrera, con dos strikes en su cuentas, Cabrera ve pasar un lanzamiento medio a medio, para quedarse frizado en el plato, y entregar el último out, del juego y de la temporada.
La angustia invadía la ciudad de Detroit, pero la alegría se apoderó de toda la Bahía de Califronia, y de todos los seguidores de los Gigantes.
Pablo Sandoval quien terminó la serie bateando para 500, con 8 hits en 16 turnos incluyendo 3 jonrrones, fue merecidamente seleccionado Jugado Más Valioso de la Serie Mundial.
GIGANTES DE SAN FRANCISCO Campeones de la Serie Mundial 2012.
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